Una mirada cercana al Volcán de Fuego
Por David Toro
27 de noviembre de 2018
El Volcán de Fuego mantiene vigilantes a los pobladores de las comunidades cercanas por el incremento que tuvo en su actividad el pasado 19 de noviembre. Actualmente ha mermado y se mantiene en niveles promedio de actividad. La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) mantiene monitoreo para evitar una nueva tragedia.
La actividad actual del Volcán de Fuego es considerada como moderada paras las autoridades de la CONRED.[1] Según su último boletín informativo, estos son los datos relevantes sobre su actividad:
- 10 a 15 explosiones moderadas por hora
- Columnas de desgasificación y ceniza que alcanzan los 4,600 metros de altura.
- Avalanchas débiles y moderadas.
El volcán mantiene las alertas encendidas. Aunque las autoridades han decidido mantener la carretera RN-14 habilitada, se mantiene un puesto de vigilancia permanente para atender las incidencias que puedan ocurrir si el Volcán aumenta su actividad.
Las explosiones de toda la semana y la lluvia de ceniza, han afectado a comunidades de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, entre ellas, El Porvenir, Morelia, Santa Sofía y San Pedro Yepocapa.
Durante una visita de Prensa Comunitaria a las cercanías del volcán, se les hizo ver a las personas del municipio de San Juan Alotenango y de aldeas cercanas, que la actividad continúa, aunque normal, bajo alerta. Están acostumbrados a los retumbos de la actividad del volcánica, pero es incierto cuando pueda incrementar.
El 3 de julio
La erupción del Volcán de Fuego, aquel día, lanzaba columnas de material volcánico a más de 17 kilómetros de altura, según los reportes de CONRED. La gran cantidad de flujos piroclásticos, alcanzaron numerosas comunidades que quedaron destruidas ese domingo. Hace una semana, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF),[2] informó que la cifra oficial de fallecidos es de 192, además de al menos 236 desaparecidos.