BID: la pandemia amenaza con aumento de desempleo y golpeará el envío de remesas
Por David Toro
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) lanzó en los primeros días de abril el análisis sobre “El impacto del COVID-19 en las economías de la región”, donde destacan que Guatemala al igual que sus vecinos sufrirán duros golpes en sus sistemas bancarios, se pronostica un potencial incremento del desempleo y para levantarse el país depende de las economías más desarrolladas.
“El Impacto del COVID-19 en las economías de la región” es el nombre del análisis sobre el escenario a corto y mediano plazo en el contexto de la actual pandemia, de las economías de los siete países de Centroamérica, México, Haití y Republica Dominicana realizado por 20 economistas internacionales y publicado en el sitio web del BID la primera semana de abril.
En términos generales este estudio destaca que ahora mismo lo más importante es realizar y mantener medidas de contención, para evitar la propagación del virus, el BID señala que en Centroamérica; donde los sistemas de salud son muy limitados las medidas de contención para evitar su colapso son fundamentales.
Destaca que las medidas necesarias como el cierre de fronteras, centros comerciales, hoteles, restaurantes, aun logrando contener al coronavirus, tendrán un impacto negativo y significativo en las finanzas públicas. Países como México, Honduras y El Salvador dependen de sobremanera de la producción china de bienes intermedios como electrodomésticos como ejemplo claro, tendrán problemas por el paro de producción, destacan Marta Ruiz Arranz y Francesca Castellani, las economistas que realizaron la introducción para el BID.
¿Qué pasará con Guatemala?
Sobre los impactos en Guatemala el BID destaca que entre febrero y marzo la actividad económica cayó un 19%, esto como producto de las restricciones de movilidad para contener el coronavirus que impiden que las cadenas de producción se cumplan, explican Jordi Prat y Gissela Texeira, los economistas que desarrollaron el análisis de Guatemala para el BID.
El BID cita que la Calificadora de Riesgo Fitch señala que la interrupción a la actividad comercial ya ha deteriorado los préstamos y esto pone en una situación compleja al sistema bancario.
Luego de salir de las medidas de confinamiento, Guatemala podría verse de cara con muchos desempleados nuevos y caída en el ingreso a las familias de todo el país, esto el BID lo explica con la baja en los envíos de remesas, las divisas que los guatemaltecos envían a sus familias representaron el 14% del Producto Interno Bruto (PIB) del 2019, la teoría de este análisis concuerda con las cifras del Banco de Guatemala (Banguat), en enero Guatemala recibió 834 millones de dólares en remesas y la cifra bajó a 746 millones en marzo, el coronavirus es el culpable de esto ya que las estadísticas de los últimos cinco años presentan una tendencia hacia la alta durante los meses intermedios de cada año.
El BID concluye que Guatemala depende en gran medida de las economías más desarrolladas como Estados Unidos para la reactivación económica, pues si los migrantes logran seguir enviando remesas y los precios del mercado internacional favorecen a los productos de exportación del mercado guatemalteco como el café, banano y cardamomo, podría existir una influencia positiva a mediano plazo.
Entre las medidas aprobadas por el gobierno del presidente Alejandro Giammattei y el Congreso de Guatemala para intentar paliar la crisis que recién comienza, destacan los dos préstamos externos $250 millones al BID y otros $200 millones al banco mundial.
Algunos diputados y bancadas parlamentarias han criticado la reacción económica y social del gobierno del mandatario Giammattei ante la crisis, por ejemplo esta mañana el diputado Samuel Pérez de la bancada Semilla publicó en su cuenta de Twitter este 14 de marzo que si todo lo aprobado no se utiliza en beneficio de las mayorías los resultados pueden ser “catastróficos”.
Pérez criticó que el fondo de ayuda familiar para personas de escasos recursos que consiste en la entrega de Q1,000.00 para aquellos que consumieron menos de 200kw/hr de energía eléctrica en febrero, sea distribuido por los alcaldes por decisión del presidente Giammattei, Pérez sugirió que sea el Ministerio de Desarrollo Social quien maneje los fondos para evitar clientelismos.
Este mismo martes el diputado Carlos Barreda y la jefatura de la Bancada de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), criticaron que el ejecutivo tenga una baja ejecución presupuestaria en los primeros tres meses del año sin incluir todavía los Q20 mil millones adicionales aprobados y califican de fracaso que entidades como el Ministerio de Salud solo haya ejecutado un 19% de su presupuesto.
https://twitter.com/JefaturaBancada/status/1250059632091041795?s=20